viernes, 31 de mayo de 2013

Sorpresa arzobispal

Quinto tranco de la gran aventura de Fidelio y Bernabé.



Y en aquesto una brillante idea vino a su mente.
"Ya lo tengo, pardiez!... Ya sé como salvar al fermoso Bernabé!... Oh, cómo no se me ha ocurrido antes!"
Y emprendió raudo el camino de la abadía, lo más raudo posdible pues el tiempo apremiaba: la vida del fermoso Bernabé pendía de un hilo!... Oh, moriría de sed o de hambre su preciado amigo?!... Le devoraría algún monstruo horrible del bosque?!... Le atacarían jabalís rabiosos, serpientes ponzoñosas u osos grises gigantes?!... Sufriría algún encantamiento de brujas, trasgos, hombres reptiles, gigantes abominables, sacamantecas, satiros, licántropos...?!
Atormentábale la idea de encontrarse a Bernabé muerto a su regreso. Oh, cielos, sí, sí, sí, la solución estaba en la abadía!..., era preciso que engañase a las monjas con sus mejores artes de truhán para que estas colaborasen en la salvación del fermoso Bernabé. Y lanzose camino arriba con denuedo y sin asomo de flaqueza, dispuesto a cubrir la legua que le separaba del gran habitáculo monjil. Oh, una legua,  mesmamente la distancia que habían de guardar los bribones comediantes y sus bribonas putuelas, alejados tales pecadores de pueblos y villas para no corromper a las gentes temerosas de Dios Nuestro Señor.
Y tras mucho ascender por intrincadas trochas, difícultosos senderos entre espinos y argomas y caminos cabrios colmados de cagolitas, divisó al fin la magnífica silueta, allí arriba, inmensa a más no poder, recortada en la bóveda celeste azul y rojiza del atardecer, de la abadía de Santa Teresa de Coscojuela, oratorio de las Humildísimas Siervas de Cristo Flagelado.



Bernabé asistió tembloroso, receloso y escagurriado a la violenta disputa que mantenían los dos caníbales. Reñían broncamente y a veces le miraban. Sin duda él era el motivo de la discusión. Oh, qué acongojo, Virgen Santa!
Y en aquesto que dejaron de reñir y uno de ellos avanzó con una gruesa estaca en dirección al muy apabullado Bernabé.
"Me van a matar, Dios mio!... Me van a matar!"

Fidelio llamó a la puerta de la abadía y abriole la anciana madre portera, Sor Ramona. Esta observó al pequeño visitante como quien observa a un mico enjaulado.
- Caracoles, contáronme que existen hombres muy mermados, pero nunca creí que fuérade cierto, ji, ji, ji!... Qué os trae hasta esta humilde abadía, medio hombre?
- Madre, es preciso que me lleve a presencia de la reverenda madre abadesa y sin la menor demora.
- Y por qué desea vuesamerced molestar a la madre abadesa?
- Una urgente misión me ha traído, tan sólo os contaré que el arzobispo de Sevilla está en peligro, el resto se lo comunicaré a vuestra madre superiora.
- Jesús, Jesús, Jesús!... - Exclamó la madre portera, sin duda refiriéndose al Hijo de Dios, pues el señor Jota Uve aún no había nacido.
Guiándose con una pequeña antorcha hizo que le siguiese por un laberinto de pasillos penumbrosos en dirección a la celda de la Reverenda Madre Abadesa.
- Arrimaos a mi, hombrecillo, que aquí hay gatos muy gordos y os pueden comer.
Llegaron al aústero aposento de la monja suprema y esta contempló con recelo a la menudez humana.
- En dónde ha encontrado aqueste retaco, Sor Ramona?
- Escuchadle, Reverenda Madre, que algo gravísimo ha venido a contaros.
- Hablad, pequeño saltamontes.
- Reverenda Madre, he de comunicaros que Su Eminencia Reverendísima Don Alonso, Arzobispo de Sevilla, fue víctima de un secuestro por parte de piratas berberíscos y...
No pudo continuar. La Reverenda Madre Abadesa, Doña Veremunda del Espíritu Santo, desmayose, dando con su enjuto cuerpo en las frías losas de la celda.
- Jesús, Jesús, Jesús!... - Exclamo la longeva Sor Ramona.

Por qué la ha causado tan honda impresión la noticia a la madre superiora?!...

El canibal de la estaca ha matado al infeliz Bernabé?!...

No se pierdan vuesas mercedes  blogueriles el próximo y emocionante capítulo titulado...
"Los ardores sexuales de Sor Casta"

jueves, 30 de mayo de 2013

Swunga-Swunga!!

  ( Terminará Bernabé en la olla de los caníbales?!... )

Cuarto tranco de la Gran Aventura de Fidelio y Bernabé.

Siéntome enormemente complacido y agradecido por los numerosos emails que me han llegado. Los lectores de las aventuras de Fidelio y Bernabé muéstranme su gozo y anímanme a que prosiga la narración. Y juro que ese es mi talante, pues no hay mayor dicha para un cuentista que la que le produce el cariño de sus leyentes.

El afligido Bernabé ignoraba que su desventura aún podría ser mayor, cuando vio aparecer a dos negros feroces que hacían gestos simiescos y producían sonidos guturales o palabras de alguna jerga animalesca o diabólica. A punto estuvo de sufrir un infarto de miocardio, aunque entonces decíase patatús o telele.
Atrapáronle los negrazos y perdió el conocimiento al instante. "Oh, Virgen del Perpetuo Socorro!" - pensó antes de desmayarse - "en qué camino de negras vicisitudes me ha metido la iniquidad de Bertoldo y la osadía de Fidelio?!" Y vive Dios que su última vicisitud era la más negra de todas las vividas hasta el momento presente de agora mesmo y con luenga diferencia!

Turbose en extremo Fidelio el granadino por no hallar respuesta a su petición de socorro. Nadie quería ayudarle en Villoria de las Majurrias. Negose el herrero a prestarle maza y cincel. El señor cura párroco amenazó con llamar al Santo Oficio porque parecíale sospechoso que un engendro mal parido vagase por el mundo sin dueño.
- Ajá, y fablasmé de otro de vuestra calaña que encadenado esta, voto a...!" - e hizo ademán de asir un cuchillo para ensartar al enano - Por Santiago que ambos sois bellacos y de la justicia de los hombres escapais!
Y escapose Fidelio del clérigo cabreado y este se creció en su enojo:
- Non fuyades, malandrín, abortillo de patas cortas, pedo del demonio!
Y fuyó hasta las afueras del lugar y rendido cayose sobre la hierba de un prado.
- Me cago en el cura y en la mala putanga de su madre!
Díjose alzando la voz a modo de desahogo. Y en aquesto una brillante idea vino a su mente:
- Ya lo tengo, pardiez!... Ya sé como salvar al fermoso Bernabé!... Oh, cómo no se me ha ocurrido antes?!

Otra idea luminosa fue la que tuvo Bernabé. Su situación límite al caer en poder de los caníbales, activó su inteligencia ilimitada, que los humanos somos animales de recursos múltiples. Utilizando el lenguaje de su cuerpo - body language que dirían los habitantes de las lejanas insulas británicas - pues no parlaba lengua africana como cristiano que era, empleando sabiamente sus armas  femeninas de seducción, mariconeando como un maricón sutil e ingenioso, hizo bueno aquello de "si no puedes vencer a tus enemigos, únete a ellos", y uniose por la vía del sexo oral o felación, aunque entonces decíase mamada o chupada, todo con el fin de ganar tiempo a fin de que Fidelio llegase al fin.
Los caníbales dejábanse mamar sus robustecidas pollas con sumo deleite, olvidándose del hambre y disfrutando con aquello que en su tribu conocíase como el "Swunga-Swunga". Oh, cuánto podría durar tal situación de ventura pasajera?!... Sabía que por mucho que se alargasen tales momentazos sexuales, los caníbales terminarían cansándose y recordando que sus estómagos reclamaban nutrientes. En de mientras la gran fantasía de Bernabé era Fidelio; con los ojos cerrados y las manos y la lengua en cada cipote enderezado, suponíase que besaba, lamía y succionaba el cipote de su caballero andante, que también era largo y robusto cual aquellos.

Oh, cuánto tiempo de placer felatorio resistirán los caníbales?!... Cuántas pajas a lengua habrá de facerles hasta que digan ya no más?!

Oh, qué maravillosa idea se le ha ocurrido al bravo Fidelio para salvar a su fermoso Bernabé?!

Amiguitos, no os perdais el próximo y emocionante tranco titulado... "Sorpresa arzobispal"

miércoles, 29 de mayo de 2013

Los caníbales quieren comerse a Bernabé.



Las aciagas vidas del gordo Bernabé y el enano Fidelio convergen en una calida noche primaveral cuando el segundo, al verse libre de sus cadenas, acude a conocer al primero. Y de esto pueden dar buena fe los muy inteligentes y atentos lectores encubiertos en los números estadísticos de este blog, así como Doña Leona Catalana y el Señor Director de El Periódico del Prat, mis más ilustres y eruditos leyentes.

Fidelio y Bernabé inician su larga huída mientras los lugareños y los feriantes duermen. Es un poblado a diez leguas de la villa más próxima, cosa que les ha facilitado la evasión, pues el lugar carece de murallas, empalizadas u otra suerte de barreras protectoras. Los vecinos de Almendrucales de la Satísima Virgen están dejados de la mano de Dios, pero no de su amo, el Conde de Tartajonia, al cual deben pagar religiosamente los impuestos, que consisten en los mejores productos de sus cosechas, los animales más lozanos y los virgos de sus doncellas más fermosas.

El gordo Bernabé carga con su pesada cadena a cuestas y sufre como un galeote, pues su obesidad y la cadena no le permiten caminar al ritmo del enano salvador al que ya adora. Mas en sus pies han  florecido las ampollas y su moral se resquebraja.
- Bien merece la pena un esfuerzo, fermoso Bernabé! - anímale el muy animoso Fidelio. - la larga noche pone una larga distancia entre nuestros opresores y nosotros.
- La noche en Primavera es corta, Fidelio, y ya se ven las primeras luces del alba. No aguanto más, oh, mísero de mi!... tengo ampollas en los pinreles y escoceduras por doquier, que mis fofas piernas se rozan y con el sudor súrgenme llagas que me martirizan. Oh, dejadme aquí mismo, buen amigo, salvaos vos!
- No, haremos otra cosa mejor: Yo, que camino más raudo, en llegaré a la próxima villa o aldea y conseguiré la maza y el cincel que es menester para romper esa cadena. Vos aguardareis aquí cobijado en esos árboles. Escuchais el murmullo de un arroyo?
- Escúcholo.
- Pues bebed agua y lavaos
E hiciéronlo así, aunque Bernabé quedose con el temor de que Fidelio le abandonase para siempre de los siempres, o peor aún: que le ocurriese algo grave que impidiésele regresar en su rescate. Oh, Dios, cuánta desdicha!

Bwgongo y Kwgongo eran dos salvajes de la jungla africana que habían huído de sus dueños cuando iban a subastarlos en el puerto de Algeciras. Y, tras internarse en el espeso bosque, trataban de sobrevivir como buenos salvajes, si bien no era labor fácil a pesar de ser ellos muy selváticos, y es que los malditos cristianos tenían selvas muy raras.
Cierta tarde, Bwgongo descubrió a un cristiano muy gordo que se mojaba los pies en el riachuelo. Pareciole la cria de un hipopotamo. Avisó a su compañero Kwgongo y ambos se quedaron extasiados pensando en el festín que se iban a dar. Necesario es precisar que ambos salvajes eran caníbales de la tribu Ktupinga, de los más sanguinarios y voraces que existen.
Cruzaron unas palabras entre ellos sin perder de vista a la bola de carne que ya les hacía relamerse. Y créome en la obligación de traducirles sus comentarios, pues aunque me consta que son todos ustedes muy cultos y refinados, no creo que sean duchos en lenguas africanas. ( A lo sumo el Señor Director de El Periódico del Prat, que es un hombre muy leído y viajado )
Traduzco entonces:
BW ( Mirando con ojos golosos al cachalote cristiano ) - Rico, rico!
KW - Pues es exactamente la dieta que me recetó el brujo Mwdongo: carne blanca cristiana muy hecha.
BW - Jo, se me está despertando el apetito. Tres largas jornadas llevamos sin probar bocado, colega. Me voy a comer una pierna entera sólo para abrir boca.
KW -  A qué esperamos entonces?

El destino más atroz se cierne sobre el desventurado Bernabé!... Llegará a tiempo Fidelio con la maza y el cincel y conseguirá salva a su fermoso compañero?!...

Amiguitos, no os perdais el próximo y emocionantísimo episodio titulado... "Swunga - Swunga!"

martes, 28 de mayo de 2013

Huída a ningún lugar.



El presente episodio forma parte de un relato sin título cuyos anteriores episodios titúlanse "El más asombroso fenómeno" y "El enano con el cipote más grande que jamás se vio en el mundo"

"No sé a quién habrás salido tú porque tu padre y tus abuelos la tenían bien pequeña", le dijo una vez su madre al enano Fidelio. Su madre murió pisoteada por los caballos de unos nobles que disputaban una carrera entre las callejas de la villa en la que moraban. Nuestro pequeño hombre quedose huérfano a los doce años.
Ahora, a sus veinte años, en su cautiverio, en sus largas noches de soledad encadenado, disponía de una eternidad de tiempo para repasar las tristuras de su vida. Pero esa noche iba a ser especial, muy especial, pues Fidelio no estaba encadenado y su ogro dormía una melopea.

Bernabé, el hombre al que su malvado hermano y la arpía de su esposa hacían pasar por mujer barbuda para lucrarse a su costa, sufría esta noche más que nunca por el comportamiento salvaje de unos mozalbetes que habían acudido a la barraca aquella tarde. Le dijeron "putaña pedorra nauseabunda", "vaca preñada asquerosa", "potrosa tiñosa enmierdada de mierda de brujas" y otras lindezas por el estilo, y para adornar tal conducta cortés lanzáronle piedritas, mondas de naranja y escupitajos, y el malvado Bertoldo no les llamó la atención.




Sintió que algo se movía cerca de su jergón. "Oh, no, ya están aquí las malditas ratas!" Le daban tanto asco como miedo, pues eran grises y largas cual gatos largos famélicos. Vio un bulto moverse en la oscuridad y calculó que era algo más grande que una rata. Cuando iba a incorporarse para tratar de espantar al repelente animalejo, escuchó una vocecilla:
- No temais, mujer, soy un amigo!
"Un amigo?!..." Estupefacto quedose Bernabé ante tal presencia y su forma de presentase.
- Soy Fidelio el granadino, un cautivo como vos. Mi dueño es el malvado Ambrosio de Cádiz, que me lleva de pueblo en pueblo anunciándome como fenómeno de la Naturaleza por la larga polla que Dios me ha dado.
A Bernabé le entró un cosquilleo por todo el cuerpo al oír lo de la "larga polla" Fidelio continuó explicándose:
- He podido llegar hasta aquí porque hoy Ambrosio emborrachose y olvidose de ponerme la cadena.
Ahora Bernabé podía distinguir todo el contorno físico del visitante e incluso las facciones de su rostro, y hasta le llegaba el tufillo de su aliento, que tal tufillo era de nabo y cebolla, lo que había cenado. Volvió a pensar en la "larga polla" y estremeciéronse sus carnes.





- Perdonad si os incomodo, me he colado por la trampilla que utilizan las ratas porque quería saber de vos. Por qué llorais todas las noches, buena mujer?... Tan grande es vuestro infortunio?...
Bien fuese por recordarle su infortunio o por llamarle buena mujer o por ambas cosas, que el desdichado Bernabé rompió a llorar desconsoladamente, y cuando húbose consolado relatole sus tribulaciones al enano. Este asombrose al descubrir que era un hombre. "Un hombre robusto, barbado y de pelo en pecho, oh!..."
- Mi nombre es Bernabé.
- El mio Fidelio.
Y un magnetismo especial les unió en un largo beso con lengua.

- Bernabé, debemos huír, esto no es vida!
- Y a dónde vamos nosotros sin un maravedí en la bolsa y perseguidos por la Justicia?... Somos esclavos, Fidelio, esclavos!, no llegaríamos a ningún lugar.
- Lo importante no es a dónde lleguemos, sino que escapemos de aquí. De mientras Dios decidirá.
- Oh, Dios a mi me ha hecho tonto, muy tonto!, y a mi hermano un canalla. Mi hermano y tu dueño Ambrosio nos atraparán.
- No eres tonto, fermoso Bernabé, tú te lo has creído porque te han hecho creer que lo eres, pero debes demostrarle que tienes inteligencia y coraje. Huyamos, fermoso Bernabé, huyamos a ningún lugar pero huyamos!
- Oh, no digais eso, no soy fermoso, soy gordo, un gordo nauseabundo!
- A mi me gustais como sois, fermosísimo Bernabé!

Convencerá el intrépido Fidelio al indeciso Bernabé?!... Lograrán huír de sus crueles dueños?!...
Queridos amiguitos, no os perdais el próximo y emocionante episodio titulado...
"Los caníbales quieren comerse a Bernabé"

sábado, 25 de mayo de 2013

El enano con el cipote más largo que jamás se vio en el mundo.




Este episodio, que habla de las vidas de unos monstruos de feria, es la continuación del episodio anterior, el titulado "El más asombroso fenómeno"
Y empiezo contándoles de Fidelio, una criatura a la que llamaban medio hombre, retaco, mal parido, cagolita y otros remoquetes hirientes que decíanle para humillarle por su condición de enano, de lo cual no era el él culpable, sino sus padres, por algún pecado que cometieron antes de procrearlo, que muy doctamente lo explicaban así los señores canónigos.
Fidelio no era exhibido en una barraca de feria por su enanismo, que entonces habíalos muchos de semejante pequeñez, como habíalos jorobados, tuertos, tartajas o tiñosos, sino por el portentoso miembro que albergaba su menudo cuerpo, un fermoso nabo de tal colosal largura que causaba el asombro de todos los humanos, bien fuesen clérigos, nobles o plebeyos. La Santa Inquisición había consentido con tales exhibiciones siempre que el enano no fornicase y mucho menos que se diese al pecado nefando, pues tal pecado era de prohibición rigurosa por abominable, pues abominable era que la verga enderezada de un hombre entrase por el culo de otro o que se entregasen dos o más hombres a chuparse sus vergas o a hacer otras marranerías que ofenden a la Santísima Virgen Nuestra Señora y a Dios nuestro Señor. Y permitíase tan solo que el enano se agitase su pirulona delante del público para ponérsela morcillona y que se viese el respetable cuan larga y gruesa era ella.
"Ca, a fe que mide casi tres palmos, y eso que no está empalmada!", opinaban los maravillados espectadores.
Y Fidelio solía guiñar el ojo a algunas mozas del público, las cuales se ponían muy coloradas o salían corriendo de la barraca. Sólo las peliforras osaban meterse con él, y hubo una, la más descarada, que en un descuido de Fidelio agarrole de la polla y tiró de ella con fuerza, causando las risas del chusmerío y sus chiquillos.
El pobre Fidelio sólo podía consolarse con la masturbación, pues no se le permitía fornicar mientras no contrajese sagrado matrimonio, cosa que jamás toleraría el dueño de la barraca, un mostachudo y cejijunto esclavista gaditano de nombre Ambrosio, el cual era dueño de Fidelio, pues se lo había comprado a un navegante argelino que mercaba con carne humana.
"Te harás de oro con este portento", díjole el mercader, "que la gente paga para ver lo que envidia" ( Aún habrían de pasar muchos años para que los propios fenómenos asombrosos se enriqueciesen como sus contratadores: Leo Messi, Michael Jackson, Lady Gaga, Justin Biever, José María Aznar... )

El mísero Fidelio llevaba unas noches inquieto en la soledad de su barraca. De la barraca más próxima le llegaban los sollozos de otro prisionero, en este caso prisionera, pues en tal barraca se exhibía y habitaba la mujer barbuda, cuyos pedos sonaban a música. El había escuchado muchas veces a su dueño anunciar el portento. Por qué sufría tanto esta mujer?... Por qué lloraba por las noches?... Sin duda estaba encadenada como él, pero el dolor de ella debía ser mayor, pues ni una sola noche dejaba de llorar.
Fidelio tuvo hermosos sueños en los que se veía rescatando a la mujer que lloraba en la barraca contigua, y se la imaginaba dulce y fermosa cual princesita doncella. Oh, fútiles sueños eran estos!... y al despertar sentíase más desazonado que nunca, pues ni la mujer barbuda era una joven princesa, ni él estaba en condiciones de rescatar a nadie, ni había nacido aún la mujer que se enamorase de un enano patizambo. "Ni jamás nacerá!", díjose. Además, para qué torturarse con estos pensamientos si a él no le gustaban las mujeres! Al cipotudo hombrecillo sólo le picaba la cosa de la entrepierna cuando pensaba en hombres con toda la barba y pelambrera en pecho, macizos y fortachones, aunque en la barraca sonriese a las mozas, que eso formaba parte del espectáculo. Pero las mozas no le agradaban aunque tuviesen barba. Oh, qué triste vida la de los monstruos de feria!

Pero algo excepcional estaba a punto de ocurrir, algo que iba a cambiar la vida de Fidelio y Bernabé llevándoles por la senda de las aventuras y las locuras extremas.

Amiguitos, no os perdais el próximo episodio: "Huída a ningún lugar"

viernes, 24 de mayo de 2013

El más asombroso fenómeno



( Los monstruos de feria son criaturas de Dios?... Tienen alma?... Sueñan?... Son tan impuros como los cómicos y los sodomitas?... )


Asi gritaba Bertoldo de Antequera reclamando la atención de la chusma que se acercaba a su barraca:
- Damas y caballeros, galanes y doncellas, este es el más asombroso fenómeno nunca visto!... Pasen y vean!... El más extraño cuerpo humano en la España de sus Católicas Majestades!
Bertoldo y su mujer, Clotilde, una mezcla de pícaros y feriantes, habían pasado mucho hambre desde que se les murió la anterior mujer barbuda a la que explotaban, Aurosia de Puerto Lumbreras, hasta que a Bertoldo se le ocurrió una idea genial para relanzar el negocio.







( Aurosia de Puerto Lumbreras, fallecida tras unas terrible diarrea estival en el Puerto de Mazarrón. Retrato realizado por Veremundo de Galapagar. Foto cortesía del Museo de Arte Pictórico de San Cosme del Prat )




- Pasen y vean!... Esto es lo más increible entre lo increible!... Por sólo una moneda de cobre verán vuesas mercedes el más prodigioso engendro parido por hembra humana: la mujer barbuda y calva!... Más aún: la mujer barbuda y calva que está más gorda que una vaca preñada!... Como lo oyen vuesas mercedes!... Pero hay otra gran sorpresa: Este fenómeno extraordinario de hembra se tira pedos con música!... Pasen y disfruten, buenas gentes!... Disfruten de la gran Zenona, la mujer barbuda, calva, gorda y pedorra musical!

La impresionante gordura sí que impresionaba, más que la barba, pues a fin de cuentas aquellos villanos de los pueblos habían visto a otras mujeres barbudas, pero en jamás de los jamases vieron a una mujer barbuda, calva y gorda, y que más bien era gordísima. Y en aquellos tiempos de hambrunas sólo se veían gorduras en obispos y algunos nobles, que hasta muchos hidalgos pasaban hambre y habíalos famélicos. Y a los niños les fascinaban aquellas pedorretas prolongadas que sonaban talmente como músicas, unas veces como un cuerno de caza y otras como el cornetín que da órdenes a la soldadesca. Y es que la "mujer barbuda" controlaba ese mecanismo de su cuerpo como nadie jamás lo hiciese. Y el contumaz Bertoldo la atiborraba a judias para que nunca perdiese tal gracia de su monumental culo.

Decíales que a Bertoldo se le ocurrió una genial idea para relanzar el negocio:
- Cómo no hemos caído en la cuenta, Clotilde?... La solución a nuestros males está en mi hermano Bernabé!
Pasmada quedose Clotilde y asina respondiole:
- Ese inútil sirve para algo?
Y afirmó convencido Bertoldo:
- Va a servir, ya lo veras; va a servirnos y mucho!
Y así fue para gozo de ambos y prosperidad. Bernabé era el hermano gordo, calvo, afeminado y de pocas luces del espabilado Bertoldo. Este fue al pueblo y arrancó a Bernabé de la tutela de sus ancianos padres, que ya estaban ellos muy cascados y le agradecieron que les librase de la enorme carga que les suponía alimentar al bobo y maricón de Bernabé, el cual, hasta ahora no había hecho otra cosa que comer y hacer reír a los vecinos con sus pedos musicales y mariconadas. Y así viose esclavizado y viajando de pueblo en pueblo con su hermano y la bruja de su cuñada, convertido en la "mujer barbuda"  Y a base de golpes aprendió sus obligaciones: "Jamás cagues o mees delante de la gente, pues nadie tiene que verte desnudo"; "Tu nombre de ahora y para siempre es Zenona, y cada vez que alguien pregunte por tal patronímico responderás: "Zenona, vuesa merced", y dales ese tratamiento aunque sean gañanes"; "Vivirás siempre oculto en la barraca y por nada del mundo saldrás al exterior porque entonces la gente no pagaría por entrar a verte"; "En nunca jamás te cortarás esa barba que te he obligado a dejarte, pues en ello va que podamos vivir decentemente"





( Así se sentía el infeliz Bernabé bajo el yugo de su hermano Bertoldo )




Los otros feriantes bien a gusto le hubiesen molido a palos al pícaro Bertoldo en caso de haberse enterado de la estafa. Pero algo excepcional estaba a punto de ocurrir, algo que iba a romper el negocio de este explotador de feria dando alas a su hermano cautivo.

Amiguitos, no os perdais el próximo y emocionante episodio titulado: "El enano con el cipote más largo que jamás se vio en el mundo"

jueves, 23 de mayo de 2013

Un cuento sin gracia, sin moraleja y sin sentido común



El niño viajó a la Luna en un caballo de cartón. La Luna miró al niño y le sonrió. Después se durmió porque la Luna duerme de día. Pero ese día a la Luna la costaba conciliar el sueño, así que el niño la cantó una nana: "Duerme, Luna lunera, o te mojo la nariz con el agua de mi regadera" La Luna se durmió preguntándose de dónde vendrían los niños: "de París, de San Cosme del Prat o de otro lugar recóndito del Universo?"
Cuando el niño y la Luna ya estaban completamente dormidos, el caballo de cartón se escapó a la Tierra porque no quería vivir encima de una Luna dormida que a lo mejor roncaba. Al cabo de las horas, cuando el Sol empezaba a ocultarse, el niño se despertó y despertó a la Luna, y la Luna le preguntó:
- Qué hora es?
Y repuso el niño:
- Quieres la hora de algún país de la Tierra en concreto o tú tienes tu propio horario lunar?
- No, era por preguntar algo, tonterías mias.
Y el niño miró directamente al lector, a usted, y le dijo:
- Hay que ver qué cosas se le ocurren a este escritorzuelo cuando no se le ocurren sus gilipolleces de todos los días!



Quién soy yo?

Soy siempre otro y soy siempre el de siempre. Estoy en todas partes, aquí y en los cincos continentes, pero para muchos es como si no estuviese. Soy gordo y delgado, pesado y liviano, provocador y conformista. Unos me aman y otros me odian; unos me queman y otros me conservan como oro en paño. Pero lo más triste para mi es que muchos no me conocen, es como si para ellos no existiese. Soy un libro.






Dia Mágico

Un día en el que al despertarme veo que entra el Sol a raudales en mi habitación es poco menos que un día mágico en Manchester. Cielo muy azul, nubes blancas muy altas, muy lejanas, pájaros contentos revoloteando... Hoy, 23 de Mayo de 2.013 ha sido un día mágico en Manchester... lo que ha durado. Muy poco, una media hora.


  

miércoles, 22 de mayo de 2013

Violencia organizada indiscriminada a edades muy avanzadas








La mayoría de las apuestas estaban a favor de Don Hermógenes porque Don Epifanio, que también era un gran luchador, ultimamente se sentía algo pachucho. El geriatra le recomendó reposo, pero para él hubiese sido un deshonor rechazar aquella pelea.

Don Hermógenes descargó violentamente su bastón contra Don Epifanio, pero este hizo un quiebro en el último instante y el grueso palo dio en el suelo. Ya era el tercer bastonazo que fallaba el favorito y sus incondicionales empezaron a temerse lo peor. Don Epifanio se revolvió con furia, vívamente jaleado por los suyos, y logró machacarle bien machacada la cabeza gracias a un bastonazo antológico. Don Hermógenes cayó al suelo con una brecha por la que manaba sangre en abundancia. Los abueletes partidarios de Don Epifanio prorrumpieron en vítores al campeón. Todos lanzaron sus boinas y garrotes al aie para mostrar su júbiloso inmenso. Y entonces alguien gritó: "Agua!, agua!", y los ancianitos emprendieron la desbandada en todas las direcciones, menos Don Hermógenes que yacía muerto en el suelo.


En la prensa del día siguiente:

"Nunca se van a acabar las peleas de bastonazos a muerte?"

"Hacemos desde esta tribuna un llamamiento a todos los abuelos para que no se dejen embaucar por los elementos mafiosos que organizan estas peleas clandestinas. Ayer murió otro anciano a resultas del bastonazo en la cabeza que le propinó su rival. La patrulla de monjas policías que acudió al lugar de la pelea ( Plaza de Santa Mirinda de Naranja en la Ciudad de los asilos ) alertada por unos vecinos cívicos escandalizados, sólo pudieron certificar la muerte de Don Hermógenes Variopinto Casaputas, de 73 años, residente en la calle Héroe Valdeminguilla, 131, de esta ciudad"

Qué pena de hijos y nietos que ahora están condenados a sufrir por la inconsciencia de unos abuelos tan irresponsables!... Cuándo van a poner coto nuestras autoridades a tanta crueldad?!
Acudamos mañana sin falta a la manifestación convocada contra los energúmenos de la Asociación Nacional del Bastón y la Garrota!

Entidades convocantes: "Asociación de madres por la abolición de los chicles con azúcar"; "Cofradía del Santo Cristo de los Apóstatas"; "Asociación de víctimas de las cagaditas de palomas"; Ex etarras por la tolerancia y el amor eterno; Catalunya Imperial, ya!!; Hermandaz musulmana de amigos del jamón ibérico; Madridistas por la pena de muerte para Mourinho; Amigos de los envíos de papel higiénico a Venezuela; Bolivarianos por la canonización de Hugo Chávez; Plataforma por la dignidad de las personas con el síndrome de Toni Cantó... y 284 entidades más.


Esta información les ha sido facilitada por...

"Fusiles ametralladores Viuda de Bin Laden e hijos. Casa fundada por Mahoma"

martes, 21 de mayo de 2013

Días felices de sonrisas felices



Llevo desde el sábado viendo sonreír a la gente en los periódicos. Qué feliz me haría ver a mis semejantes tan dichosos si fuesen otros labios los portadores de esas sonrisas!
Veo sonreír al etarra Valentín Lasarte mientras empuja ufano el cochecito de su bebé y le acompaña su rolliza esposa. Los tres están llenos de vida, rebosantes de felicidad. Lasarte mató a siete personas, siete seres vivos que ahora están llenos de muerte.



  

Veo sonreír a la Infanta Cristina, una mujer que siempre sonríe ante los periodistas, con o sin gafas de sol. La suya es una sonrisa clónica, sujeta a sus labios, pegada con pegamento Imedio, una sonrisa de careta, como la de Francisco Camps.
Y el Rey también sonríe porque se encuentra sano y lleva varios días sin romperse nada, y además se ha desprendido del yate por "austeridad" ( eufemismo de "por lavado de imagen" ) Cuesta 20.000 eurillos llenar el depósito del barquito. Y yo me pregunto: Esos 20.000 eurillos se van a emplear en medicinas para los pobres o van a engrosar también el capital de la secta de la brujería católica?





Otro amigo de los brujos fanáticos que también sonríe mucho es el ministro Wert. Ha quemado en la hoguera "Educación para la ciudadanía" y ahora impone a los niños los ritos de la secta. La sonrisa de Wert tiene algo de reptilesca, como la de aquel personaje de Vázquez Figueroa, "La Iguana" ( Un buen libro, Doña Leona ) y muy parecida a la que muestran dos ratas uniformadas en una foto para el triste recuerdo: Jorge Videla y Augusto Pinochet.
Por cierto, el papa Francisco I, que también sonríe un montón, lo tiene muy jodido si pretende que todos estos hijos de puta de misa diaria se comporten como cristianos de verdad; aunque yo, sinceramente, ya no sé que coño es el cristianismo ni quién fue la puta que parió el invento.
Sin embargo, Gallardón, que también es de la secta, cada vez sonríe menos. Hay dos individuos que ultimamente apenas sonríen: Gallardón y el Príncipe Felipe. Aparecen con caras de amargados en todas las fotos. Debe ser que follan poquísimo, osea: menos que yo. Bueno, pues que tomen ejemplo de Don Francisco I, que no folla pero sonríe un montón.
Y al que se le ha borrado la sonrisa definitivamente es a Mourinho, si es que sonrió alguna vez.